Pablo Leiva: “En paisajes no tiene nada que envidiarle a Pucón"

Race Report Triatlón de los Volcanes 2016

Todo comenzó el 10 de febrero cuando me llama el Folo para ofrecerme cubrir el Triatlón de los Volcanes, representando a Trichile, desde adentro. Es decir, competir en el medio y como era primera vez que se hacía, escribir un race report con los detalles y por menores que se ven sólo cuando eres el que sufrió. Tuve que ajustar el plan de entrenamiento ya que estaba full maratón y me tuve que meter al agua y pedalear con más frecuencia.

Llegó la semana de la competencia y me junto con Mauricio Aravena en el terminal de buses. Él iba a cubrir la carrera desde afuera con la #CoberturaTrichile. Bicicleta arriba del bus y partimos a Puerto Varas viajando de noche. Llegamos allá viernes por la mañana y la organización nos fue a buscar al terminal, la Coty Donoso también venía en el bus y sería Juez de la competencia.

Nos fuimos al Hotel Patagónico, lugar donde se entregarían los kit y se realizaría la charla técnica a las 7 pm. Como llegamos temprano estaban recién armando todo. La María José Elgueta (una de las organizadoras) nos dijo que nos quedábamos en unas cabañas en Ensenada, ya que el triatlón en sí es en esa localidad. Ensenada queda como a media hora en auto desde Puerto Varas en dirección a los Saltos del Petrohue, por lo tanto teníamos que esperar que alguien nos llevara y eso sería a las 14 horas aproximadamente. Como teníamos tiempo y hambre nos fuimos a tomar desayuno al Cassis, lugar imperdible de Puerto Varas, en plena plaza y con una carta muy variada entre desayunos, sandwichs, kuchen, tortas y helados artesanales.

Volvimos al Hotel Patagónico como al mediodía y ya había más movimiento, estaban entregando los kits que incluía lo típico para la carrera en cuanto a registros, una polera de recuerdo y un gel energético SUPER SIZE. Nunca lo había visto antes 250 gramos, que incluye 10 porciones de 63 calorías por porción, sabor manzana y en su totalidad maltodextrina y algunos aminoácidos. Mauricio me presenta a otro de los organizadores que justo resultaba ser el creador de este gel y nos habló un poco sobre el producto. Decidí hacer lo que nunca se tiene que hacer en una carrera, probar algo nuevo. Pero no traía geles de Santiago porque no había alcanzado a comprar y pensé bueno en la expo compro, sin embargo no había un stand de nutrición, lo que se echó de menos y siempre es necesario que haya, sobre todo en carreras de distancia medio ironman.

Nos fuimos a Ensenada con la Cote y en el camino nos cuenta que todo transcurriría en el camping (Barlovento) donde estaba nuestra cabaña, que venía siendo la misma de los organizadores. La cabaña era gigante, tenía 11 camas, dos pisos, estaba frente al lago y frente a la zona donde se realizaría la natación. Descansamos un rato, almorzamos y tipo 18 horas volvimos al hotel a la charla técnica. A las 20 horas estábamos libres de acción y podíamos ir a dormir para tirarnos al agua a las 8 am al otro día.

Como nuestro transporte oficial tenía que quedarse ordenando algunas cosas en el hotel me conseguí que Mara, una triatleta de Iones, que correría postas con mi amiga Dani, amablemente aceptara llevarnos a Ensenada a mí y el pack que venía conmigo, Mauricio, Coty, la Bici armada y la maleta de la bici. Nos fuimos en el pick up sin inconvenientes. Comento esto porque no es trivial que si te alojas en Ensenada tienes que sí o sí ir por lo menos una vez a Puerto Varas a buscar el kit de competencia y escuchar la charla técnica. Y si te viniste a Puerto Varas en bus o avión no tendrás auto para hacer estos tramos Ensenada-Puerto Varas o viceversa, si es que te quedas en Puerto Varas al otro día bien temprano ir a Ensenada para la carrera. Hay que tener en consideración esto.

El día de la carrera las alarmas sonaron a las 6 am, me levanto y ya había mucho movimiento en la cabaña y en la playa, hacía mucho frío, así que me abrigué bien para ir a tomar desayuno junto con el Mauro. Me fui al parque cerrado como a las 7:15, me quedaba como a 200 metros caminando, me chequean la bici, me rayan mi número (52) en las piernas y a dejar todo ok en el rack para irse al agua.

La partida estaba planificada a las 8 am y pensé que se iba a atrasar, porque veía a todos los triatletas muy lentos en el parque cerrado y muertos de frío. Me fui a calentar al lago como 20 minutos antes y cuando faltaban 10 minutos para las 8 escucho a la organización por alto parlante diciendo que estábamos a 10 minutos, salgo del agua se dan las últimas indicaciones y a nadar.

El circuito era una especie de M, es decir playa-boya-playa-boya-playa. A 475 metros de la orilla las boyas se veían muy chicas, yo soy miope pero nado con lentes con aumento, incluso así me demoraba más de lo normal en enfocarlas cada vez que levantaba la cabeza. El lago era una taza de leche, llego a la primera boya y cuando empiezo a volver me crucé varias veces con triatletas que venían de frente (iban a la boya y yo iba de regreso a la playa). Esto me pareció peligroso, ya que como no todos nadan derecho habían posibilidades de colisionar de frente con alguien que anduviera medio perdido. Hubiera sido ideal una segunda boya estilo Pucón, para evitar esto.

Luego del primer giro, salgo y miro cuantos llevaba adelante. Pude distinguir dos grupos claros, los punteros que me llevaban varios metros ya y un segundo grupo que estaba como a 50 metros. Me tiré fuerte a nadar la segunda vuelta para alcanzar al grupo que estaba cerca y así agarrar los pies de alguien y aprovechar el ritmo que llevaban. Salí del agua, miro el reloj: 32 minutos, saludo al Mauro para la foto y a correr al parque cerrado, me salté el puesto de strippers, pero me contaron que fueron super útiles y le sirvió a muchas personas.

La T1 era bien larga, había que correr desde el borde del lago hasta la calle principal. Llegué a la bici y le empiezo a preguntar al público cuantos habían salido ya y nadie me respondía, hasta que alguien me dice “menos de 10 weon concéntrate”. Así que eso hice y me fui con la bici.

Saliendo de Ensenada el track era en dirección hacia Cascadas, el tráfico estaba cortado por carabineros, lo cual se agradece mucho. Los primeros 10 km eran muy duros, NUNCA encontré un trayecto plano, sólo repechos y curvas, muy técnico. Como estaba compitiendo con la bici de ruta de un amigo casi no me puse en los perfiles aero en estos 10 km, todo el rato en el manillar con mucho juego de cambios, plato chico, plato grande, plato chico, etc. Luego de estos 10 km se ponía un poco más plana y recta, así que pude ponerme en los perfiles a ratos.

El pavimento en general estaba muy bueno a excepción de dos tramos, en el pueblo de Cascadas habían lomos de toro enanos, esos que son casi imperceptible para los autos pero no tanto para las bicis; y llegando al retorno había un pedazo de 500 metros que habían varios hoyos por el medio del camino. En el retorno había un puesto de hidratación donde daban isotónico de 600 ml, me tomo una pastilla de cafeína de 200 mg y vamos de vuelta.

Me voy fijando cuantos venían cerca y que tan cerca, para intentar que no me pasaran, ya que hasta ahora me habían pasado 4 triatletas y todos me habían dejado atrás, así que iba super solo. Llego a Ensenada y a empezar el segundo giro, como ya sabía lo que se venía estaba preparado, me paré mucho más en los pedales y cuando me cruzaba con los punteros calculaba cuanto me llevaban de ventaja. La alimentación iba a la perfección, el super gel lo había disuelto en una caramagiola con agua y ya casi me lo había tomado todo, el sabor a manzana no se sentía mucho pero tampoco era un mal sabor; además de eso me comí 2 mini snickers, media barra de cereal y 8 frugele, calculé que en calorías iba bien al igual que con la hidratación, porque me habían dado ganas de hacer numero 1 dos veces.

Llegando a Ensenada me doy cuenta que le había descontado segundos a dos triatletas que venían delante mío, uno que corría postas y el otro era individual, pero no quise esforzarme en pasarlo y pensé dejar ese momento para el running.

Me bajé de la bici en 2:42, entro a T2 y me tomé mi tiempo para ponerme calcetines y zapatillas, sacar comida, visera y a correr.

Pude pasar a los dos que venían adelante en el primer kilómetro, me estaba sintiendo bien corriendo, así que me puse mini metas a medida que avanzaba el running, en un principio pensé que podía correr en 1:20. Pero claramente estaba siendo demasiado optimista, después me propuse que no me ganara ninguna posta (cuando me bajé de la bici tenía 2 adelante), después me propuse correr en 1:24 e intentar pasar a alguno de los que tenía adelante.

El trote era muy plano, tenía una pequeña subida llegando al retorno, que como no era tan pronunciada se recuperaba lo perdido en la subida, apretando un poquito en la bajada. Los últimos 3 km me los sufrí enteros, llevaba una puntada que me quería hacer parar, pero la intentaba aguantar porque sabía que John Roa venía al acecho un poquito más atrás. Aprieto lo dientes y ya se veía la meta, cruzó la meta en 4:46 con parcial de 1:25 en el trote. Más que conforme con el resultado.

La carpa de recuperación estaba espectacular, sándwich de carne o de salmón con lechuga, tomate y mayo; mucha fruta, frutos secos, cervezas en lata y cerveza artesanal servida desde chopero. Masajes mirando el lago, sillas plásticas para descansar y el escenario al frente. La premiación la hicieron a las 3 pm (algunos pocos aún no terminaban), lo que encuentro que fue una buena decisión, porque la mayoría de los atletas están muy cansados, con ganas de cambiarse ropa, ducharse e irse a sus casas a descansar y no es tan entretenido cuando tienes que quedarte 5 horas más para esperar que los de los chip impriman los tiempo y los organizadores se tomen varias horas para subirse al escenario. De esta forma la mayoría de los participantes están presentes y aunque no hayas tenido lugar puedes aplaudir a los que si lograron podio. Los premios estuvieron muy buenos, las postas se ganaron zapatos Merrel al primer lugar para cada uno, el segundo lugar una chaqueta Merrel y no me di cuenta que fue al tercero. Los elite ganaron premio en dinero, 150.000, 100.000 y 50.000 pesos y a los premios por categoría también habían buenos regalos, yo me gané unos lentes de natación por el primer lugar de la categoría 25- 29.

Además al final regalaron dos cupos al triatlón de Bariloche que se realizará en enero del próximo año, en modalidad escape a la isla, del cual fui uno de los afortunados.

La organizadores de este triatlón son los mismo de Vulcano Ultra Trail, carrera que trajo a más de 1.000 participantes el año pasado y tengo que reconocer que para este triatlón a pesar de ser solo 100 inscritos aproximadamente se la jugaron con todo en hacerla lo mejor posible, se fijaron y preocuparon de muchos detalles que los triatletas agradecemos. Por el nivel de organización que dieron deberíamos compararlos con un nivel de organización como la de Pucón, y deberían copiar las buenas ideas que se aplican en esa carrera.

Utilizar más información gráfica, por ejemplo para los track de la carrera, muchas veces una imagen dice más que mil palabras. Pensar además que si la carrera la hacen un sábado es más difícil que la gente que trabaja el viernes hasta las 6 de la tarde llegue a la carrera un sábado a las 8 am. La fecha que eligieron está muy buena, porque está lo suficiente alejada de Pucón como para recuperarse bien y no tan lejos como para que el clima de Puerto Varas sea tan crudo.

Estando en Puerto Varas nos enteramos que habían suspendido el Challenge de Puerto Varas que estaba fijado para el 10 de diciembre, y el triatlón que se hacía en el verano de distancia más corta tampoco se hizo este verano. Así que está quedando como el único triatlón que se hace en el año en esta increíble plaza, que en paisajes no tiene nada que envidiarle a Pucón.

Para lo triatletas, por último, puede ser una buena opción de alargar la temporada de triatlón. Muchos triatletas (incluyéndome) corremos Pucón y de cierta forma dejamos de lado los entrenamientos largos en bicicleta y natación; y nos enfocamos en Maratón de Santiago que se corre en abril. Pero siendo bien sinceros el Maratón de Santiago no es una carrera ideal para buscar marca, ya que tiene harto desnivel y mucho smog. Quizás la mejor forma para disfrutar más de este deporte es alargar la temporada a un último medio en marzo, aprovechando el fondo de Pucón y el buen clima del verano para seguir entrenando y bajarse a correr distancia más corta en MDS, no buscando marca, sino más bien participar simplemente. Hay muy buenas carreras de running en otras ciudades de Chile que son más planas, con aires puros y bien organizados.

Pablo Leiva

_{Fecha de la carrera: Sábado 19 de marzo de 2016}

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