El Coaching y el Triatlón, ¿qué tienen que ver?
Hay muchas definiciones para el Coaching. Para mí resulta más fácil definirlo como una metodología o herramienta que nos permite mirarnos, cuestionarnos, escucharnos y entender cómo es nuestro comportamiento frente a la vida. Ir descubriendo y aprender cuál es nuestro potencial y las limitaciones, juicios o creencias, que no nos permiten alcanzar la realización de los logros que anhelamos en cualquier ámbito de nuestra vida.
Hablamos de “Coaching Deportivo” como un entrenamiento más y fundamental en la vida del deportista. Un proceso permanente que le permite pensar y reflexionar en aquellas cosas que siente no lo dejan ser el deportista que espera y cumplir con sus objetivos. En un trabajo intensivo por aceptar que los intentos fracasados son también un aliciente para mejorar el rendimiento, el potencial y la motivación.
Desde mi experiencia como triatleta y como coach de algunos compañeros, he visto diversos comportamientos, que tienen como factor común, el compartir una disciplina exigente que no sólo exige al máximo, sino que también cuestiona de la misma manera, perjudicando muchas veces el rendimiento final.
Algunos casos típicos son: el triatleta autoexigente, que sólo está circunscrito a él mismo y en querer cumplir a cualquier costo la meta impuesta, exigiéndose hasta lo imposible, destruyendo su cuerpo y no disfrutando del proceso que lo lleva a la meta.
También hay triatletas que tienen muy buenos resultados en sus entrenamientos y que al momento de competir no pueden demostrar con la misma eficacia su desarrollo en la carrera.
Otros con algunas creencias que los limitan a enfrentar de diversas formas cada competencia, algunos ejemplos son el “Ironman 70.3 Pucón”. Esta competencia representa las más altas exigencias para un triatleta, con una etapa de cierre sobre una península de subidas y bajadas perfectamente pronunciadas, condiciones meteorológicas rudas, y un entorno riguroso, que finalmente alimenta la “creencia” del por qué no llegar a la meta.
Así hay tantas otras razones que nos llevan a pensar y a emocionar de muchas formas distintas, dejándonos pocas oportunidades para hacer una pausa y entender qué es lo que podría cambiar para llegar a cumplir los objetivos.
La buena noticia del Coaching Deportivo, es que te abre la posibilidad de probar la manera distinta. Con la misma meta en mente, te permite llegar por otro camino. A partir de tomar conciencia de lo que quieres (motivaciones), cómo lograrlo desde quién eres (herramientas), y cumplir ese plan de acción diseñado especialmente para ti.
Por último quiero terminar con el testimonio de Michael Jordan (mejor jugador de Baloncesto a nivel mundial): “He fallado más de 9.000 tiros en mi carrera. He perdido casi 300 juegos. 26 veces han confiado en mí para tomar el tiro que ganaba el juego y lo he fallado. He fracasado una y otra vez en mi vida, y eso es por lo que tengo éxito”.
Con mucho cariño a todo el mundo del Triatlón.
Martes 29 de marzo de 2016
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Soledad Díaz de la Vega
Coach Deportiva
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