Pia Sanhueza: “Sólo me gustaría tomarme las cosas más relajadas"
Estuvimos con Pía Sanhueza previo a su primera incursión en un IM, ya que el domingo debuta en la distancia y nos comenta que es el comienzo de su fin en el triatlón. Aunque siendo sinceros no queremos creerle y esperamos que no cumpla con su palabra de correr el Mundial 70.3 de Australia y alejarse de las pistas.
Pía nos cuenta que hace 8 años que está separada y que ahora hace un tiempo que está pololeando. Tiene dos hijos, Catalina (psicóloga) de 32 años y Nicolás (abogado) que tiene 29. Ambos casados desde el año pasado, uno en enero y otro en marzo.
Trabaja, hace 20 años, en una empresa de comercialización de papeles finlandeses a cargo de la parte administrativa y de comercialización. Trabaja en la misma empresa desde hace 20 años ya que puede adaptar el trabajo a su fanatismo por el deporte.
¿Siempre practicaste deporte?
Desde chica hice muchos deportes. Atletismo, carreras de fondo y todo lo que había en deportes en ese tiempo en el Santiago College, donde no había tantas actividades deportivas en ese tiempo como hay ahora que hay mucho más. Pero siempre participaba en todos los campeonatos, era bien activa. A los 12 años me metí a jugar tenis en Santa Rosa, donde entrené varios años hasta que me salí porque yo también esquiaba durante las vacaciones, y mi entrenador era tan exigente que no me atrevía a volver (risas). Ahí fue cuando empecé a jugar jockey durante 15 años con ex alumnas de mi colegio. Pero siempre corrí por placer, por las calles. Y cuando me salí de jockey me metí a un gimnasio, donde Rodrigo Zamorano me motivó a meterme en carreras, como la de Nike por ejemplo y me di cuenta que le pegaba y me gustaba.
¿Cómo partiste en el triatlón?
Comencé con el triatlón al año de ingresar a FullRunners. Los conocí en las carreras, como te contaba, y justo cuando lo hice ellos estaban planificando ir al Maratón de Nueva York 2007. Algo que para mí era una idea de locos. Pero ahí empezó todo y al año siguiente corrí el Maratón de Berlín y ese año, el 2008, comencé a pedalear con FullRunners. Lo encontraba entretenido por el hecho de compartir con el grupo.
Y motivada me compré una bici tres días antes de que partieran a Viña, porque algunos de ellos participaban al otro día en el Costa Pacífico y me acuerdo que fui a Scott donde pedí la más barata y que fuera de ruta, junto con zapatos. Recuerdo que antes de partir practiqué dando vueltas a la manzana en los Trapenses (risas) y le dije a Felipe (Salas) que quería ir con ellos y yo creo que fue un suplicio chino para Felipe, porque iba histérico conmigo, pero llegué súper y fui como la revelación porque nunca había pedaleado. Ahí me di cuenta que me enamoré de la bicicleta.
¿Cuándo corriste tu primer Pucón?
Lo corrí el 2009 y he participado en 7 en total. Pero me costó mucho acomodarme en el nado, ya que partí de cero.
¿Cuándo sientes que fue el quiebre entre que partiste en el triatlón al que seas una referente entre las triatletas?
Yo creo que fue cuando hice mi primer Pucón y clasifiqué al Mundial el 2009 de Clearwater. Ahí me di cuenta que me creí el cuento. Aunque igual el circuito era plano (risas), pero entendí que era el deporte para mí, porque siempre he sido aplicada, comprometida, disciplinada, súper machaca. Yo creo que todo aquel que hace el triatlón en serio, debe ser así.
¿En pocos días más corres tu primer Ironman, qué pasa si clasificas a Hawaii?
Hay que hacer las carreras primero y pueden pasar muchas cosas en 12 horas. Quiero hacer otras cosas, ya que hago las cosas demasiado en serio y además soy competitiva, entonces no lo tomaría. No sé. Pero te prometo que ahora no es mi objetivo. Sólo me gustaría tomarme las cosas más relajadas. Pero por la boca muere el pez.
Por ejemplo yo dije que después de Australia iba a ser mi despedida. Pero vi como todo el mundo se estaba inscribiendo en Pucón 2017, me inscribí igual. No sé qué pueda pasar.
¿Nos va a abandonar una de las buenas triatletas?
Ya estoy en una edad que no quiero hacer el deporte de una manera tan competitiva. Me quedan muchos años de circo. Pero tengo que ser más relajada, pero no sé cómo se hace (risas). Pero tal vez en este Pucón pueda hacer algo más liviano.
Piera: ¿Cómo vez la competitividad a nivel mundial comparado con el nacional?
Han aumentado en cantidad y calidad a nivel mundial tanto en hombres como en mujeres. Y acá en Chile también, pero me he dado cuenta que en nuestro país las mujeres mayores se están atreviendo y se motivan.
Piera: ¿Cómo planificas tu día?
De partida vivo sola y me levanto a las 5:30 de la mañana para entrenar. A las 9 estoy en mi escritorio, pero tres horas antes estaba entrenando. Y llegó agotada, porque trabajo hasta las 18:30 horas y cuando me invitan a una comida, me muero. Soy fome.
Alfredo, mi pololo, cuando se queda en mi casa se levanta también a las 5:30 a pedalear y entrenar.
Piera: ¿Cuáles son los beneficios que te apañe tu pareja?
Un apoyo fundamental y es demasiado importante tener a alguien en la misma parada.
Piera: ¿Qué se siente correr con tu hijo?
Fue la carrera más emblemática de mi vida. Corrimos el Pucón juntos y pensé que me iba a sacar 10 minutos y llegamos a la T2 y nos fuimos a correr juntos. Ahí primó la experiencia y él se murió en la península, pobre!, pero al final hicimos un gran tiempo, aunque no llegamos a la meta juntos como queríamos. Fue una gran experiencia que haga el mismo deporte y hemos creado un vínculo muy especial.
Con su hijo Nicolas, compartiendo Pucón
¿Te queda algún sueño del triatlón?
No, ninguno. De todo corazón, con todo lo que he hecho no tengo otro más que cumplir.
¿Te acuerdas de alguna frustración en el triatlón?
Se me olvidan las frustaciones. He tenido problemas con el traje de baño, pero se me olvidan. Son mucho más las gratificaciones. Pero claro, siempre pasan cosas que son parte del cuento. Pero nunca he dejado de completar una carrera, y abandonarla creo que sería frustante.
Piera: ¿Qué haces para cuidar tu cuerpo?
Siempre he sido así de flaca. No es un tema porque siempre he hecho deporte, como lavarme los dientes. Pero lo que me hace ser fit es la alimentación y la vida que siempre he llevado.
Compartiendo Jockey con su hija Catalina
Piera: ¿Qué le dirías a una mujer de 50 años que quisiera unirse al triatlón?
Que no lo duden, porque cualquiera puede hacerlo. Aparte es mucho más entretenido, muchos menos lesiones, el ambiente que gira en torno en el triatlón y ahora con tantas carreras, que se atrevan y lo hagan.
La última pregunta, ¿Cuántos likes tiene que tener la entrevista para que no nos abandones en el triatlón?
(Risas). Superemos los 150! (risas). Pero estoy inscrita en Pucón y aquí sigo.
Muchas gracias, te veremos en Brasil y en Australia porque no queremos que te vayas!
Entrevista realizada el Jueves 19 de mayo de 2016