Moisés Torres: Ironman 70.3 Mooseman 2011
La carrera de Mooseman, la carrera de venados, que lo comprobé en vivo y en directo, pues 2 días antes de la carrera salimos a correr con Fernando Heredia y de pronto salió un venado muy bonito y tranquilo, recién ahí entendí que era el Ironman de Moose-Man, el hombre venado, plop....
Bueno respecto a la carrera, muy familiar, sin muchas chayas, muy simple, pero tenía lo necesario. En lo personal, este era mi debut real en triatlón como Tri Pro, pues el anterior sólo fue un duatlón en Pucón. Así que tenía una gran duda, como iba a ser el agua, ya que la verdad que sólo he realizado trabajos de mantención y pocos trabajos de desarrollo, así que era un gran misterio esta parte. En fin, salí en 27 minutos del agua, en el 9º lugar Elite, así cumplí con el objetivo de salir en el grupo masivo de natación. En la bike fue otra cosa, sabíamos que era dura, pero nunca imaginamos que fuera tanto. Dos subidas, pero duras, muy duras y largas, subíamos a 9 km por hora. El camino era tal cual pedalear entre Tome y Colemu. Este segmento se sufrió como se hace en cada subida, recién pude sentirme cómodo los últimos 40km. Antes fue complicado. Marqué un tiempo e 2:40, un tanto lento, pero con la confianza que no iba ahogado.
En el trote salí desde un comienzo con una idea clara, sólo iba a realizar un trote rápido hasta el km 10. Así lo hice y cuando vi que iba en el lugar 11º y llevaba 10 km solté un poco para no apretarme tanto para el próximo domingo, que será una carrera muy muy importante. Corrí los 21km en 1:28. Fue bastante cómodo, así que ojalá la estrategia sirva y alcance a recuperarme para el domingo, ya que aún tengo los cuadriceps muy apretados, pero mañana recomezaré a moverme para preparar la carrera del domingo en Kansas.
Bien amigos, en resumen, la carrera muy muy dura, pero muy recomendable. Eso de que Pucón es la carrera más linda del Mundo no se si será tan verdad, pero dejémoslo así. Como anécdota les puedo decir que hoy pasé un poco de susto pues de Houston a Wichita, me fui en un avión sólo para 50 pasajeros, con 2 corridas de pasajeros por un lado y 1 por el otro. La cosa fue así: Íbamos aterrizando y, de repente, el mini avión se elevó y nos fuimos para arriba. Yo no cachaba nada, dimos una gran vuelta y recomenzamos el aterrizaje, cuando íbamos llegando a la loza, vi muchos bomberos, muchos policías y vehículos con balizas. Ahí caché que no era nada normal, íbamos aterrizando y de nuevo lo mismo, NO aterrizó y yo no cachaba nada, todo el mundo hablando y yo con cara de papelucho pérdido, I´m lost. Ahí se puso raro el clima. Después de volar durante otros 20 minutos, aterrizamos, NUNCA CACHE QUE ONDA.
Ya amigos, un gran abrazo.
Doy gracias públicas a Feña Heredia por todo.
Nos vemos pronto en un nuevo reporte.
Atte.
Moisés Torres
