Bajar de peso sin pasar hambre
Siempre escucho decir que para bajar de peso hay que cerrar la boca… Pero mi problema es que cuando quiero bajar de peso estoy entrenando y entonces paso hambre y estoy cansado… ¿Cómo puedo hacer para bajar de peso sin pasar tanta hambre?
Estimados amigos triatletas, existen algunos mitos que es buenos aclarar, si cerrar la boca implica pasar hambre, entonces:
- Pasar hambre NO es sinónimo de bajar de peso en forma sana, orgánica ni menos balanceada. Porque cuando el individuo “pasa hambre”, es el propio cuerpo que avisa las necesidades imperiosas de cargar energía (ojala de moléculas energéticas sanas), que si el individuo las ignora, los depósitos propios del organismo proceden a satisfacer esta necesidad, entonces, todo el esfuerzo que ha realizado el atleta, lo desperdicia, todo el esfuerzo para tonificar o para rendir o para lograr avanzar y correr cada vez más lejos sus propios límites, los hipoteca, cada vez que siente hambre.
Por lo tanto, NO es sano pasar hambre, al contrario es un aviso que debemos atender y prestar atención no sólo en el entrenamiento, sino en la competencia, del mismo modo y a posteriori informar de estas sensaciones al Asesor Nutricional, de modo de poder otorgarle estas notas o signos clínicos que marcan la diferencia entre el atleta que llega a la meta o aquel que llega a la meta íntegro y con un riesgo acotado de falta energética.
- La idea es que para poder bajar de peso, deben estar asesorados, porque no es lo mismo: bajar de peso total o bajar de peso magro o bajar de peso graso, en general, lo que desean siempre los atletas por regla es: bajar de peso sin perder potencia ni resto físico (aquella porción que otorga el 2º aliento o la sobremarcha para “dar un palo” o para rematar en el sprint final). Por lo tanto, una vez asesorado, el común de los atletas debe bajar su porcentaje de grasa, es decir, debe quemar sus depósitos adiposos, en forma orgánica, ordenada y energéticamente cubierta, porque el atleta quema depósitos adiposos fundamentalmente bajo 2 premisas:
En abundancia energética: es decir, comiendo cada 3 horas, lo que provoca necesariamente un aumento en el Metabolismo Basal.
En trabajo físico aeróbico: sostenido por sobre los 30 a 45’ dependiendo del biotipo, grado de entrenamiento y parámetros cineantropométricos (edad, estatura, % de grasa v/s magra, etc.).
Esta forma de quemar, es decir asesorado, es lo óptimo (llegas a tu meta personal con el mínimo de recursos involucrados), por lo tanto no pasas hambre y te tonificas, te marcas y obtienes tu perfil energético y físico adecuado a tu disciplina deportiva.
Dr. Q.F. Italo Meneses Taibo
Asesor Nutricional
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