Alejandra Vergara: “Esta carrera fue contra la cabeza”
Race Report Mundial Xterra 2018
Desde chica he practicado deporte. Hice judo durante 12 años, siendo campeona nacional varias veces. Luego en la universidad conocí a Javier, mi marido, y con eso el Mountain Bike.
En el MTB participé en carreras de enduro y de XC. Con el tiempo nuestros pasatiempos fueron cambiando y llegamos al triatlón.
Ale Vergara y Javier Montenegro
Mi primer triatlón fue el promocional de Pucón del 2017, donde gané la general mujeres. Esto me motivó a seguir entrenando. El 2018 corrí el 70.3 de Pucón y el 70.3 de Lima.
Entre estas dos carreras preparé el Xterra de San Bernardo, en un principio pensando que no tenia ninguna posibilidad, ya que tenia una bicicleta de enduro muy pesada. Pero las cosas se me fueron dando y gracias a Trichile y Specialized pude testear la Epic Comp el día de la carrera.
Con esto sabía que podía tener posibilidades, por lo que me tomé más en serio los entrenamientos de MTB.
Clasifiqué con un muy buen tiempo, incluso metida entremedio de las corredoras elite y segunda general en el age group.
El Mundial
La organización dice que fue la carrera más difícil de Xterra en 23 años. Suertecita la mía.
Antes de la largada estaba tan nerviosa que me costaba respirar. Veía las olas y no podía creer que yo iba a estar ahí adentro. Nos abrazamos con las otras 2 chilenas que fueron para darnos fuerza y ánimo.
El circuito era una M como en Pucón, por lo que teníamos que salir y entrar 2 veces.
En la primera entrada y la primera salida estuvo todo bien. Entramos con grandes olas, agarré espuma algunas veces pero nada muy fuerte.
La segunda entrada fue horrible. Mientras corría a la gigante masa blanca explotando al frente pensé "me voy a morir”.
Me revolcaron 5 olas gigantes. Todas reventaron antes de que yo las pudiera pasar. Tomaba aire y esperaba a salir a la superficie en algún momento. Había mucho pánico en el ambiente, muchas niñas desesperadas gritando y llorando mientras salían a respirar y la siguiente ola estaba explotando. Perdían gorras y lentes.
Yo sólo sabía que tenía que mantener la calma y afirmar mis lentes. Estaba cansada de tanto luchar, ya no era terminar la carrera, era nadar para poder salir de la rompiente. No sé cómo logré entrar en la 6° ola antes de que reventara... y de repente estaba nadando sola a la boya, todas las otras niñas seguían en el remolino.
Quedé tan pero tan cansada de luchar con las olas (la segunda salida no fue tan terrible, pero igual me revolcaron algunas olas) que al subirme a la bici me sentía pésimo. La respiración a full y ardor de piernas...
La primera parte de la bicicleta fue pedaleando, ya que fue la parte que la organización modificó debido a la cantidad de barro que se había acumulado en el circuito de la carrera, por lo que hicieron un bypass por un camino pavimentado de un par de kilómetros.
Con su marido
Pero cuando volvimos al circuito original y entramos al barro, no había forma de mantenerse arriba de la bicicleta.
En los primeros kilómetros nos fuimos juntas con Tania (amiga chilena con la que hice el reconocimiento el miércoles anterior a la carrera). Fue muy tranquilizador y motivador, íbamos dándonos ánimos y avisándonos cuando pedalear y cuando correr, felices y cansadas.
Javier, Tania y Ale
Cada cierto tiempo debía detenerme a sacarle el barro a las ruedas de la bicicleta, ya que era tanto que se trancaban y no giraban. Con Tania nos fuimos juntas hasta que tuve que comenzar a sacarle el barro a la bici cada vez más seguido y me fue imposible seguirle el ritmo. Creo que en total caminé como 12 de los 30K del circuito.
Me pasó de todo. Me caí, los cambios no pasaban por el barro, no me pude enganchar nunca a los pedales, se me trabó la cadena entre los rayos y el piñón 2 veces, se me trancaban las ruedas muchas veces por el barro y las ramas, pedí ayuda para destrabar la cadena, ayudé a una niña que se cayó feo delante mío…
Pasé por todos los estados, en su mayoría positivos, desde "qué espectacular donde estoy", admirando los paisajes de las cimas, "que rica esta bajada" (me tiraba algunas bajadas patinando con las ruedas deslizándose para todos lados) "esto es lo más bacan que he hecho en mi vida". Pero a veces, especialmente los últimos kilómetros, ganaban los malos pensamientos, "que se termine luego este camino de…"
Junto a Javier Montenegro
El trote tenía mucho barro también, con subidas pronunciadas con barro resbaladizo lo que hacía muy difícil poder caminar sin caerse. Pero por lo vivido en la natación y en la bici, hicieron que el trote fuera lo más llevable, lo más disfrutado.
Esta carrera fue contra la cabeza.
El sacrificio de entrenar durante 8 meses por un objetivo es alto. Uno se pierde asados, cumpleaños y eventos familiares por tu objetivo.
Entrenar durante el invierno, en condiciones secas o con lluvia, parecer ardilla de tanto hacer rodillos, entrenar en piscina y aumentar la cantidad de sesiones para intentar ser mejor, correr por cerro, en pista y en calle.
Y luego el día de la carrera te tocan condiciones climáticas que nunca imaginaste, donde apenas pude nadar a ritmo competitivo la primera parte y después tuve que cambiar el plan a modo supervivencia, para luego meterse al barro y caminar la mitad del circuito que tendría que haber sido pedaleando, es para desanimar a cualquiera.
Pero cuando estaba empujando la bicicleta, pensaba que aunque tuviera que empujar la bici los 30km lo iba a hacer porque estaba muy preparada físicamente y ya había sobrevivido al agua.
Creo que esta carrera me hizo crecer como deportista y como persona. Hizo darme cuenta que se puede superar cualquier reto, sólo debes estar decidida. Y que las cosas no siempre van a salir como una espera. Pero eso no significa que van a salir mal, sólo hay que dar lo mejor de uno en cada momento.
Quiero agradecer a todas las personas que han estado detrás de mi preparación, kinesiólogos, nutricionista, preparador físico, a mi entrenador Tomás Rivera que ha hecho un trabajo muy serio y dedicado, al equipo Tricostas por aportar con la dosis extra de motivación en todos los entrenamientos grupales, a mi familia y en especial a mi marido Javier Montenegro, que me ha apoyado en todo y que comparte conmigo esta pasión.
- 5:20:02 overall
- Swim: 35:22 min
- Bike: 3:27:15
- Run: 1:17:25
- 8° de la categoría 25-29 años
- Xterra World Championship
Ale Vegara
Tricostas
Fecha de la carrera: Domingo 28 de octubre de 2018