Claudio Correa: IM Hawaii 2014
Lo primero que quiero hacer es agradecer a mi esposa Jennifer por su apoyo, comprensión y paciencia, aguantar a un tipo que se levanta todos los días entre 5 a 5:30 AM a entrenar durante 30 años es casi como una santa, también quiero agradecer a mi gran Coach, Rubén Arias por el apoyo y el perfecto plan muy gradual que me diseñó desde Abril tomando las precauciones para no lesionarme y siempre con un sabio consejo, un especial agradecimiento a mis grandes partners Alejandro Fernández y Boris Aljaro que me acompañaron en muchas de las sesiones de entrenamiento épicas y siempre con la palabra de apoyo para esta gran aventura.
El deporte ha sido parte de toda mi vida y el triatlón partió hace 30 años corriendo el primer Pucón, en ese tiempo no habían clubes especializados en esta disciplina y es así como llegamos con un amigo al Gimnasio Olimpo, dado que el dueño Rodrigo Salas había corrido el primer triatlón en Chile y podía dirigirnos el entrenamiento que necesitábamos. Rodrigo en esos años (1984) me mostró el primer video de un IM en Hawaii donde ganó el legendario Scott Tinley, quedé maravillado como podía un ser humano llegar a esos niveles de tolerancia y resistencia, y me dije espero algún día poder ir a correr ahí.
Por ello también agradezco a Universidad Católica y especialmente a Cristian Ulloa, ya que sino es por la lotería especial que organizaron para Chile no hubiese sido posible para mi clasificar y cumplir este gran sueño.
Para todos los que nos apasiona este deporte y es parte de nuestras vidas, creo que correr el IM Hawai es finalmente la culminación, lo que he vivido en estos días, el misticismo en que está envuelto, las historias de combates épicos y proezas personales y finalmente las condiciones casi extremas en que se corre, la hacen una carrera única y una experiencia que deben vivirla.
Llegué el martes en la noche a Kona después de casi un día y medio de viaje, durante el viaje leía y conversaba con Tomás Medel que lo ideal para aclimatarse al calor era llegar unos 10 días antes, pero para los egipcios que trabajamos eso es imposible, créanme esto si es calor y se siente.
El día miércoles despierto a las 4:30 AM, dado el cambio de horario 7 horas atrás de Chile cuesta mucho acostumbrase, pero hay que obligarse desde que uno llega, salgo a las 6:00 AM a la calle para ir a nadar y encontrarme con el grupo de chilenos, pero ya están las calles llenas de personas corriendo o en bicicleta entrenando, llego al famoso Pier donde es la partida y está full, con Tomás vemos al lado a Dave Scott (The Man) preparándose para nadar, le pedimos una foto y el gustoso y amablemente acepta, le doy la mano y le digo que lo he seguido durante 30 años y ha sido una inspiración por sus grandes hazañas.
Claudio, Dave Scott y Tomás Medel
Las calles de Kona durante los días previos son una verdadera revolución, por todas partes triatletas de todas partes del mundo y como conversamos con mi gran y viejo amigo Ricardo Cumplido lo más FIT del mundo, es cierto lo más FIT del mundo y Correita, en realidad para haber estado a la altura de todos estos Dioses debería haber bajado otros 5 kilos y haber hecho pesas todo el año.
El jueves salimos con Vicente y Patricio para hacer unos 40 km de bici a las 8:00 AM, en la carretera vemos pasar a Andrew Starikowicz, quien viene a batir la barrera de las 4:12 que impuso el año pasado en la bicicleta, un rato después pasa Sebastián Kienle, y luego pasa con una moto de apoyo Frederik Van Lierde, uffff que salida a pedalear viendo a todos estos monstruos
El sábado me despierto a las 4:30 AM, paso a buscar a Tomás y caminamos por Alii Dr., el ambiente es impresionante, lleno de gente por todas partes, entramos a la ceremonia de marcaje, me pesan, hacen varios controles de identificación y finalmente entramos a parque cerrado. Voy directo a mi bici a revisar presión de los tubulares y poner el computador.
Estoy en el agua en primera línea, flotando junto a más de mil triatletas, comienza a amanecer y dan el disparo, frente a todos mis temores que la partida sería un infierno de golpes, no lo es y rápidamente entro en ritmo, pero el mar está movido cuesta ver la siguiente boya para orientarse, el día antes en la TV vi un noticiero que decía que habrían marejadas y oleaje en ciertas partes de la isla, paso en 29:30 el retorno, cuando me quedan 400 metros para salir me pasan nadando por el lado lo que yo creo son las líderes de amateurs Damas, van a un ritmo endemoniado, finalmente salgo en 1:09.
Me cambio completo de ropa, para ir lo más cómodo posible, salgo de parque cerrado en bici, el calor ya se siente. Hasta los primeros 50km voy a un promedio por sobre 35 km/h, comienza el viento, bajo a 25 km/h, y luego un falso plano, ahora voy a 15km/h, comienzan ráfagas de viento muy fuertes, por seguridad me levanto del aerobar, la bicicleta se estremece, también el calor se comienza a sentir me arde la cara.
Estoy en el kilómetro 80, ha bajado la intensidad del viento, paso a un competidor con la ropa destrozada y pierna y hombro pelado, me dice que se cayó por el viento, miro hacia mi izquierda y se ve el océano y puede verse lleno de crestas blancas por el viento que produce oleaje, es un día durísimo.
He pasado el retorno en Hawi, ha sido desde el kilómetro 50 con viento en contra y cruzado, ahora tendrá que ser a favor, hay partes que voy a 50 km/h, pero los vientos cruzados juegan una mala pasada, veo por lo menos tres competidores que se han caído hace poco rato, con heridas y están recostados en el piso, ráfagas cruzadas que estremecen la bicicleta, si bien voy rápido por seguridad prefiero no apoyarme en el aerobar.
Estoy en el kilómetro 130 cruzando los campos de lava, el calor es tremendo, me he alimentado e hidratado bien y vengo tomando pastillas de sal cada una hora, me siento bastante bien.
Llego finalmente a parque cerrado, salgo a correr los primeros 15 km, debemos correr hacia el sur por Alii Dr, mi hotel esta a unos 1.000 metros de la partida, esta Jennifer mi Sra, me da ánimos, el calor lo siento, voy con 10 pulsaciones más de lo normal, en una de las estaciones de aprovisionamiento tomo dos vasos de hielo, me vacío el hielo dentro de la tricota por la espalda y también en el pecho, la sensación de alivio es indescriptible, trato de correr entre estación y estación de aprovisionamiento, continuó poniéndome hielo, hidratándome y comiendo geles.
A estas alturas si bien tenía un objetivo en tiempo ahora es sólo cruzar la línea de meta y llegar lo mejor posible.
Ya estoy en el kilómetro 18, está atardeciendo, se ve una preciosa puesta de sol, parece un regalo para distraernos del sufrimiento. Durante el trote he pasado a varios competidores, escucho “Vamos tío Claudio!!!”, es Tomás que ya viene de regreso y le deben quedar unos 5 ó 6 km para llegar, poco después veo a Pamela, nos damos un grito de aliento, y un rato después me encuentro con Piera, le grito Vamos Chile!!!, me sonríe.
Ya está oscuro y me deben quedar un par de kilómetros para doblar hacia el Energy Lab, por lo menos ya la temperatura ha aflojado, hay alguna brisa suave que refresca, pero está tan oscuro que no me veo ni las zapatillas, a lo lejos acercándose se escucha voces de apoyo, al doblar hacia abajo para entrar a Energy Lab, me entregan tubos de luz por seguridad, es una imagen espectral todo oscuro y ves a cada corredor con estos tubos de luz.
Finalmente llegó a la esquina de Palani doblo y comienzo a bajar, aumento mi ritmo, me quedan casi unos 2000 metros para llegar a la meta, paso a varios competidores, entro finalmente a Alii Dr., y escucho un grito “Vamos Correa!!!”, es Felipe Donoso, Sra y amigos, paro y doy un salto de pirueta para hacerlos reír, en la noche Donoso me envía un WhatsApp que me dice "me sorprendiste con el saltito".
Estoy a 100 metros de la meta, entro a un túnel de gente que quieren que golpee sus palmas, me gritan "you are an Iroman", la emoción es indescriptible, veo la tarima acercándose y finalmente cruzo la meta con un tiempo de 13:46, feliz he cumplido uno de mis mayores sueños: Hacer el IM Hawai, ahora que escribo me emociono pero debo reconocer, me quedó un gustito amargo por el tiempo que hice, había entrenado duro y bien, sin embargo, los Dioses de Hawaii con el viento y el calor tenían escrita otra historia para mí.
Es por lejos el IM más duro que me ha tocado correr, pero sí de una magia indescriptible y volvería feliz a correrlo, es una experiencia única y si tienen la oportunidad de hacerlo no la dejen pasar.
Felicito a todo el grupo de chilenos que corrieron, Pamela, Piera, Vicente, Tomás, Bruno, Felipe y Alex, verdaderas maquinas por su logro y tiempos que obtuvieron dada las condiciones, definitivamente los que han clasificado son verdaderos dioses y mis sinceros respetos y admiración.
Parte del consuelo es que mencionan que es una de las ediciones con condiciones más duras en los últimos 15 años, de hecho Andrew Starikowicz se bajo sobre las 5:00 horas de la bicicleta muy lejos de su récord y finalmente se retiró, veo los listados y hay muchos que no pudieron llegar.
Vicente Bobadilla, Claudio Correa, Tomás Medel, Felipe Donoso y Alex Gajardo. Sentadas Pierangela Dezerega y Pamela Espinoza (en la foto falta Bruno Fritsch)
Finalmente no puedo dejar mencionar a Rodrigo Parra, quien viajó con su familia especialmente a ver esta carrera, su apoyo en cada minuto fue muy importante y también a todo el equipo del TYM que con sus frases de apoyo desde Chile me alentaron en cada kilómetro, lo mismo para Jorge Vargas, Mauricio Medel y Rodrigo Gras, fueron un gran y fundamental apoyo y grandes amigos.
Un abrazo a todos,
Claudio Correa
TYM
Fecha de la carrera: Sábado 11 de octubre de 2014