Héctor Espinoza: “Patagonman, sin lugar a dudas la carrera más dura que he realizado”
Race Report Patagonman 2018
Para ni no es la mejor época para realizar competencias en estas fechas, trabajo con Brigadas Forestales y en este periodo estamos levantando los recursos y todo lo que eso implica. Sin embargo, una oportunidad como esta no se podía dejar pasar, mi entrenamiento no fue el adecuado, pero había que aplicarle toda la experiencia y la cabeza para terminar. Pasaron muchas cosas para tirar la toalla, pero seguimos adelante. Por trabajo tuve que planificar viajar el viernes y regresar el lunes. El jueves en la tarde perdí mi celular y quedé incomunicado, tomaba el último vuelo a Santiago desde Concepción a las 22:00 horas, finalmente el vuelo salió a las 01:20 de la mañana. Llegamos con mi esposa Elizabeth a las 02:30 horas al Aeropuerto de Santiago, me dirigí a los transfer que tienen convenio con el hotel para el traslado y no estaba en el listado de reservas por error del hotel. Llamé al hotel para cancelar la reserva, mi vuelo salía a las 06:20 de la mañana, me quedé en el Salón Cóndor del Aeropuerto tratando de dormitar.
Como arrendé camioneta para mi Staff, no entregué la bicicleta el día sábado a la organización y la armé el Sábado a las 18:30 horas y la salí a probarla como a las 19:00 horas. Fui hacia el Bypass donde están los miradores hacia el Río Simpson, pero probando pasar de plato chico a grande se me salió la cadena y se atascó, así que me fui caminando al hotel para destrabarla. De repente pasa una camioneta y me queda mirando, se detuvo más adelante y me dice si había pinchado, yo le dije que se había salido la cadena y estaba trabada, entre los dos la sacamos y me dijo que la cadena estaba torcida y que había que cambiarla, gracias a dios que al ser de Coyhaique hizo las llamadas respectivas y conseguimos comprar una cadena para 12 velocidades, mi bici tiene 11 y en otro taller cortarla e instalarla, en resumen a las 20:30 la bici estaba lista para el domingo.
Pasaron muchas cosas, pero el objetivo estaba claro, correr y terminar. Casi no dormí esa noche, me imagino como varios. Me fui con mi hijo Alejandro a Puerto Chacabuco para iniciar el gran desafío. El agua la encontré espectacular, no la sentí fría y con mucha agua dulce superficial, no estaba salada, después de tanta sicosis con el frío en el agua para mí fue lo más fácil. En la bici muy bien hasta el cruce que va a Cerro Castillo en Balmaceda, ya en el kilómetro 90 había visto a Elizabeth y Verónica, novia de mi hijo. La Cuesta del Diablo y mi falta de fondo empezaron a pasarme la cuenta, de hecho en los dos últimos repechos antes del km 135 me bajé de la bici y caminé, nunca había hecho eso. Ya en el km 135 me alimenté, llegué muy débil y con ganas de abandonar, decidí dormir, le dije a Elizabeth que necesitaba meditar y que me despertara en 15 minutos, dormí como 20 minutos, me sentí mejor y continúe. En Cerro Castillo entregue la bici y dije nos vemos en el km 30, así no más fue, muy duro, me transformé en un corredor de bajada, prácticamente caminé todas las subidas por los senderos. Antes del km 30 venía otra vez medio débil hasta que apareció Elizabeth y Verónica, que me fueron a encontrar, qué felicidad. En el km 30 decidí dormir nuevamente otros 20 minutos, hasta que me despertaron y a terminar. Elizabeth me acompaño 4 km y luego se fueron a Puerto Ibáñez para esperarme en la meta, así corrimos juntos el último km y llegamos a la meta a tocar la campana.
Gran desafío, para los que llegamos en esta primera versión, hemos hecho historia y no lo olvidaremos, somos Patagonman.
Héctor Espinoza
FullRunners Concepción
Fecha de la carrera: Domingo 9 de diciembre de 2018
