Piera Dezerega: "mi primera general AG y un top 10"
Race Report Ironman Mar del Plata 2018
Cuando supe del Ironman de Mar Del Plata el año pasado las ganas de correrla fueron inmediatas, pero había un problema: me casaba ese día jajaja. Así que los planes cambiaron, pero este año no me la quería perder.
Era una apuesta complicada, ya que iba a ser primera vez que hacía un cliclo corto. Para Ironman a mí me gusta dedicarle 13 semanas full, sin ninguna carrera en medio. Esta vez eran 7, divididas por 2 de descanso post Kona. Y cuando digo descanso, es descanso. A lo más un nado loco, pero con suerte 2.000 metros. Tres semanas fuertes donde la intensidad y los kilómetros subieron de forma exponencial, seguida por una más suave, y finalmente la descarga. Mi cuerpo reaccionó bien a los entrenamientos, mucho mejor de lo que pensé. Pero creo que fue más gracias a mi mente y al apoyo del tremendo grupo que vino a Mar del plata, Lalo y Carlos, que hicieron que fuese muy llevadero. No niego que tiré un par de veces la toalla, pero rápidamente me ayudaban a recogerla y ahí estaba otra vez!
El viaje
Llegar es complicado, ya que hay que hacer coincidir vuelos de SLC-BAS, BAS-MDQ. Investigué y descubrí que Aerolíneas Argentinas no cobra maleta y es la única que hace el tramo hasta Mar del Plata, así que no dudé y compré ese vuelo. LATAM me ha funcionado TAN mal que a Aerolíneas Argentinas le pongo un 7!
Llegué el miércoles con tiempo suficiente para descansar y recorrer. El pre carrera, como siempre, en grupo se hace de lo más entretenido. Esta vez éramos pocos, pero unidos. Aproveché de invitar a mi partner Gina, que venía por trabajo a Buenos Aires, y lo pasamos increíble. Entre risas y tallas esperar el gran día se hizo muy agradable.
Ya no los lateo más con previas y vamos a la carrera!
Como introducción, esta vez sabía perfectamente quiénes eran mis competidoras. El objetivo de venir a Mar Del Plata era solo uno: volver con el cupo a Hawaii. Calculando por la cantidad de inscritas, el cupo era sólo 1 (finalmente dieron dos, pero eso lo supe al día siguiente de terminada la carrera) por lo que había que ganar, no había otra forma. Si íbamos a ver tiempos y resultados, debía ganar la categoría. Pero una cosa es la teoría y otra la realidad. En la cancha se ven los gallos. Había que ganar, y mi ventaja estaba en el agua. Sí, aunque no lo crean jajaja!!! Pero más por la temperatura. La ventaja de ser chilena es que estamos acostumbrados a climas así y aguas heladas, y ésta lo estaba. Pero nada comparable con Pichidangui o Muelle Barón.
Si en la bici había viento para mí era mejor, ya que al ser una carrera más o menos plana las ventajas se reducen, pero si existía el factor viento, estas aumentan.
Natación
A las 5 am en el parque ya estaba claro, lo que hizo que fuese muy agradable, pero hacía un frío horrible. Mientras estaba arreglando cosas alguien habló por el alto parlante y dijo que la natación sería sólo de 1.500 metros por la diferencia de temperatura entre el agua y ambiente, y que por norma no se puede nadar más. Vaya a saber uno si eso es así! Días antes falleció un brasilero y rescataron a varias personas que estaban ahogándose, por lo que razones para suspender el agua había, pero no estaba del todo suspendida, aunque sí más corta.
Entrar al agua fue HORRIBLE. No podía, veía que todos me pasaban por el lado. Era una lucha contra las olas y me desesperé. Por suerte sólo se entró una vez! El nado fue muuuy movido, además que poco se veía en el agua para encontrar unos pies. Lo bueno es que estaba muy despejado y las boyas se veían perfectamente, sobre todo cuando estaba en la cresta de la ola jajaja. La salida también fue mejor de lo que pensé y no me revolcó una ola! Casi casi salgo primera del agua! Pero como no me abrigué en la transición y fui la primera en salir en el rolling start, fui la primera mujer en salir de la T1. Así que bien, nadie iba a ir a mi rueda, que era lo que quería!
Bici
La bici eran 3 giros, donde se partía con 25 km con viento a favor. El frío se sintió en los primeros km, nada comparable con julio o agosto en Santiago, pero sí frío. Como la primera hora de un pedaleo en septiembre, con rayos de sol que algo calentaban. En el primer giro la verdad es que no me sentía muy bien. La noche anterior había dormido pésimo, en el hotel donde me quedé las murallas eran bien delgadas y nuestros vecinos no pararon de hablar y reírse. Creo que dormí a lo más 3 horas.
Pero en ese momento me encontré con Gina que me gritaba que iba a 10 minutos. En eso pensé y me dije que era una buena ventaja. Llegué al retorno y, al verla de nuevo (Gina estaba a 5 km del retorno), me dijo que ahora iba a 8. Ahí me dije: “me descontaron”. Iba en el km 60 aproximadamente, y tenía muchas posibilidades, pero pensé: "ellas no son más fuertes que yo en la bici. En general la gente parte fuerte y luego lento, y yo soy al revés. Dormir poco no afecta". Con eso en la cabeza decidí mi estrategia. Iba a adelantar la cafeína al km 85, que era el giro, e iba a ir tranquila hasta ahí (que venía todo el viento a favor). Desde ahí le iba a poner, con viento en contra. Iba a darle con todo, y así fue. Cuando llegué de nuevo donde la Gina me gritó que iba a 15 minutos. Listo, la estrategia funcionó y no era necesario repetirla. Podía dar tranquila mi tercer giro. Por suerte fue así, jajaja, porque cómo dolió!! El viento no daba tregua y me costaba mucho pasar los 26 ó 27 km/h en la parte del viento. Quería que se terminaran rápido esos 30 kms, pero la verdad es que no avanzaba muy rápido jajaja. Así que se hicieron muuuuy lentos. Siendo sincera, no sabía cómo me iba a bajar a correr. Sentía las piernas bien tocadas, y haberle puesto tanto con el viento en contra en el segundo giro, posiblemente lo iba a pagar. Trataba de tranquilizarme pensando que el tercero lo hice bien tranquila, y así me fui peleando con mi mente un buen rato hasta que llegue a la T2!
Trote
Me bajé de la bici y ningún calambre. Excelente señal! Partí a cambiarme y salí a correr. A 4:30 iba perfecto, pero llego al giro y puaf! Qué viento!!! Era una pared! El primer giro no dolió tanto, ya que estaba con las piernas frescas y disfrutando. Aproveché para ver bien cuánta ventaja llevaba al mirar el reloj en el retorno, y cuando me encuentro con las otras de mi agegroup, que venían todas bien juntas, eran 2,8 km, que por dos me daban una ventaja de 5,6 km. Suficiente como para relajarme, pero mi inseguridad extrema no me lo permitió. Eso, sumado a que en el segundo giro iba poniéndole ritmo a Jorge, me dije: “imposible guatear”.
En cada giro aprovechaba de mirar, y variaba la distancia en +\- 100 mts, por lo que no había de qué preocuparse. Si yo mantenía, o incluso si bajaba un poco, el cupo, que era mi principal objetivo, era mío. Luego veía a las otras agegroup y me di cuenta de que la general también era mía. Pero estaba mi otra meta, que era bajar las 3:20 en maratón. Cuando quedaban 10 km vi que era posible si corría a 4:50 el mil. En ese momento venía a un promedio de 4:45 y de los 10k que quedaban, 7 eran con viento en contra. Los dos primeros los hice en 5:20 (jajaja), por lo que mi plan ya sabía que no iba a ser factible. Así que me dediqué a disfrutar los últimos kilómetros, no apreté los dientes. Ya tendré mi momento para correr en 3:20 o en menos si se puede.
Igual me fui con un PB de 3:22. Fue un maratón plano, pero con un viento que te frenaba. Para ser sincera, me llevé una grata sorpresa de mi perfomance: mi primera general AG y un top 10! Correr con tremendas mujeres Elite esta carrera me motivó. Cruzarse 10 veces con Mirinda, Sarah Crowly, Sarah Piampiano, o que te adelante Sussie Cheetheam es una gran experiencia. Si bien en Kona uno corre con ellas, el circuito no te permite verlas. Acá era un roce constante que te permitía verlas andar como motos en la bici. Y para qué decir los hombres, misma historia. Pero creo que el start list de mujeres estaba más de miedo esta vez.
En verdad me encantó la carrera. La gocé porque tenía un circuito desafiante y por lo que les conté recién. Si bien hay muchas cosas por mejorar, para mí fue perfecta, la disfruté y me traje lo que vine a buscar.
Quiero agradecer a las marcas que me apoyan (MedPro, K-One, XTERRA, Liv/Giant), al Banco BCI, a Team Bustos y a la Gina, que menuda amiga que me saqué!! La pobre ni comió para gritarme los tiempos jajaja. También a mi familia y la de Carlos, a Carlos, que me aguanta tanta tontera, a Felipe Araya, que con su paciencia infinita responde mis preguntas, a Juanito, que me compuso mis piernas (ambos de MedPro), a Trichile por difundir, a Juanito, Abraham, Jorge y André (Team Bustos en MDQ), al grupo de chilenos que me dieron apoyo dentro y fuera, a la Caro Trewhela y Cami de Proswim, y, por supuesto, al GRAN Lalo.
Pierangela Dezerega
Team Bustos
Fecha de la carrera: Domingo 2 de diciembre de 2018