Testeo Nike Pegasus 31
Con la asesoría técnica del campeón olímpico Mo Farah y más de 25.000 kilómetros de testeo, Nike lanzó hace unos meses la Pegasus 31, una maravilla que tuve el placer y oportunidad de testear en las últimas semanas.
El modelo Pegasus de Nike debutó en 1983 con el boom del running ochentero en USA y han sido el caballito de batalla de la marca de Oregon, siempre ofreciendo una gran amortiguación para el corredor de pisada neutra y peso medio, como la mayoría de los gringos. Las Pegasus han evolucionado en sus más de 30 años pero siempre mantienen su raíz, que las ha llevado a ser amadas por los corredores: Amortiguación, confort y confiabilidad. En esta versión 31, mantiene las características que le han dado fama y es por eso que mantiene un sinnúmero de fieles corredores. Esta nueva edición de Pegasus aporta mayor rapidez y sensibilidad en la amortiguación, más que cualquier otra versión en estos 31 años.
Esta zapatilla presenta un forrado doble sin costuras, muy suave, lo que le da una estructura firme que envuelve el pie otorgando estabilidad y una agradable sensación. Es como si la zapatilla abrazara tu pie sin puntos de presión. La parte del talón y collarete envuelve el talón con firmeza y además tiene áreas reflectantes. El doble forro junto con otorgarle mucha estabilidad, también le quita algo de ventilación y es una invitación para el barro y el polvo, así es que si lo suyo es el trail running, siga buscando, ya que esta no es la zapatilla para usted.
La mediasuela viene obviamente con tecnología Zoom Air con fibras de tracción fuertemente estiradas y tejidas dentro de la unidad presurizada, que tras el impacto liberan su tensión y vuelven a su estado original, generando una propulsión adicional. La suela es bastante rígida, lo que le da estabilidad a la pisada y al no ser tan blanda, no se pierde respuesta en la zancada.
La suela de goma es resistente a la abrasión con el típico diseño waffle que inventó BIll Bowerman y que es marca patentada de la casa de Eugene, Oregon. Es una zapatilla de batalla, para corredores de largo trajín, y peso sobre 70 kilos (aunque yo peso 68) de pisada neutra a sobrepronador leve, que otorga mucha protección e ideal para temperaturas medias a frías.
Recomendable para todo tipo de distancias y superficies. Las he usado a diferentes ritmos desde 5:30m/km a 4:00m/km en asfalto, pista y maicillo. Me sorprendió la estabilidad en la pisada, la respuesta en la salida y el hecho que no sean extremadamente amortiguadas, a mí me resulta cómodo.
El heel drop (diferencia de altura entre el talón y antepie) es de 10 mm lo cual es bastante y es muy probable que a muchos no les acomode. A mí me gustaron y acomodaron. Te obliga a correr un poco más inclinado.
No es una zapatilla liviana (345 gr.) pero la comodidad y confort compensan. Creo tener el pie ancho, por lo que prefiero zapatillas amplias que te dejan la sensación de cierta libertad de movimientos. Las Pegasus cumplen perfecto este requisito. Las probé en un par de ocasiones sin calcetines, solo como un experimento para medir su comodidad en situaciones extremas. No problem.
Mo Farah comentó que inmediatamente sintió una diferencia al testear el prototipo del Pegasus 31: “La primera vez que me puse las Pegasus 31, me sentí el más rápido de la tierra. Me encantó que tuviera una mayor agilidad y un ajuste más cómodo, combinado con la suave amortiguación y la protección que necesito para correr los más de 150 kilómetros que entreno por semana”. Para los más normales con pisada neutra e incluso un poco de pisada con el talón, esta es la zapatilla correcta.
Por Ricardo Cumplido (Miércoles 19 de noviembre de 2014)