Testeo: Reebok FloatZig 1
Reebok ha lanzado recientemente la primera versión de las zapatillas de calle FloatZig. Hace algún tiempo Reebok anunció el lanzamiento de las FloatZig 1, que junto con otros modelos conforman la estrategia de la marca por entrar a esta fuertísima competencia que existe hoy por zapatillas de gran nivel técnico. Recordemos que Reebok fue hace 30 ó 40 años uno de los grandes referentes de marcas de zapatillas, pero luego, por diversas razones perdió ese liderazgo en el segmento del running, que hoy pretenden recuperar.
En particular, las FloatZig estuvieron en proceso de desarrollo por 2 años, buscando obtener una zapatilla a un precio accesible, cómoda, liviana y con buena respuesta, para entrenamientos de lujo o bien carreras con el mejor soporte posible.
Los primeros trotes con las FloatZig me llevan rápidamente a pensar que Reebok consiguió bastante bien lo que buscaba con este modelo. Son bastante firmes y me gustó mucho la sensación que entrega la amortiguación, ya que son blandas, pero no quedaba atrapada en la espuma de la mediasuela. Otra cosa que me encantó fue el estilo de estas zapatillas, con una onda retro muy noventera.
Al trotar con las Floatzig se sienten muy estables y la amortiguación, sin ser demasiado blanda, permite una buena sensibilidad del terreno, entregando un retorno de energía controlado y una fluidez en toda la transición de la pisada.
Son zapatillas diseñadas para corredores no tan avanzados, con pisada neutra (para pronadores o quienes necesiten mayor soporte están las Reebok FoatZig Simmetros, que tienen una mayor estructura).
La capellada es suave, respirable y espaciosa en la zona delantera y tiene refuerzos en los costados para dar buen soporte al pie e impedir que se desplace al interior de la zapatilla.
La lengüeta tiene bastante acolchado, integrada en una estructura que la deja en su lugar.
El material que utilizan en la mediasuela es la clásica espuma Floatride Energy Foam en base a TPE (elastómeros termoplásticos). Es blanda y suave al tacto. Entrega un “smooth ride”, que creo que en español no tenemos una palabra precisa para describir que es suave, pero al mismo tiempo acolchado, aunque no ultra acolchado.
Una mediasuela con espuma en base a TPE tiene la gracia de que entrega un equilibrio entre amortiguación controlada y buena respuesta. La desventaja es que no es un material tan liviano, por lo que no se usa para los modelos de velocidad. Aunque siendo honesta, en el nivel de runner no elite en el que estoy yo y la mayoría de los que practicamos este deporte, no tiene gran influencia esos gramos extra respecto del modelo de competencia (peso de 254 gr en talla 6,5 US femenino).
Ahora bien, ¿dónde está la genialidad de Reebok respecto de la mediasuela?: Hicieron un excelente trabajo con el diseño Zig Tech, que permite que la energía al momento del contacto con el suelo sea dirigida hacia la parte delantera entregando un buen impulso.
- La cantidad de espuma que utilizan es relativamente alta, 31 mm en la zona del talón y 25 mm en el antepie (drop de 6 mm). Dejan una capa de espuma que, gracias a los cortes en forma de zigzag entregan una mayor flexibilidad de lo habitual y por tanto una excelente transición de la pisada.
- La espuma en la zona del talón, tiene un diseño tal que lo acuna, permitiendo un mejor retorno de energía a medida que el ritmo es más alto y la tendencia de la pisada es a apoyar menos el talón.
Considerando que las FloatZig 1 no tienen un rocker agresivo, ni placa de carbono, como para clasificarlas como zapatillas de velocidad, para mí, anduvieron muy bien a ritmos más apuraditos que lentos. El diseño permite que, a medida que se aumenta el ritmo, las zapatillas respondan cada vez mejor.
La suela de goma Energy Band de extensión casi completa, tiene un diseño parecido a una red, con pequeños tacos que apuntan hacia adelante. Permite una súper buena adherencia, incluso con el pavimento mojado o en gravilla.
Luego de analizar los materiales y diseño de las FloatZig, y de haber trotado con ellas durante algunas semanas, podría resumir con una palabra la conclusión a la que he llegado: sinergia. Esto, ya que si pensamos en los componentes de forma aislada, no tienen ninguna característica demasiado extraordinaria, pero la suma de todos ellos nos da como resultado unas muy buenas zapatillas.
Para mí, ha sido un agrado trotar con las Floatzig 1. Las recomiendo para corredores neutros que prefieran tener una buena cuota de sensibilidad del terreno y control de la pisada, porque no son pesadas y la amortiguación no es tan esponjosa. Sin tener una amortiguación exagerada, entregan la cuota exacta de comodidad. Son una buena opción de zapatillas para variados tipos de entrenamiento. Las sentirás cómodas tanto para entrenamientos diarios, trotes largos o trotes a ritmos más exigidos.
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Por Karmina Valenzuela
Viernes 12 de julio de 2024
