Testeo Under Armour HOVR Infinite
Zapatillas Conectadas!
El testeo: Recibí la invitación de Trichile para testear el nuevo modelo de la serie HOVR: Las Infinite. Un año atrás tuve la oportunidad de probar las HOVR Sonic con excelentes resultados (Ver Testeo), por lo tanto no lo dudé ni un segundo. Así, en el reporte me centraré en las diferencias respecto a las Sonic y, desde luego, en la gran novedad que presenta este modelo: El sensor bluetooth integrado que permite registrar un entrenamiento sin necesidad de GPS!
Recorrí con ellas cerca de 100 kilómetros en 5 semanas de testeo. Coincidieron con el inicio del período básico, por lo tanto fueron básicamente entrenamientos de distancia media a ritmos bajos, aunque, por supuesto, también aceleré y las metí a la pista para ver cómo se comportaban.
Impresiones: El diseño de la zapatilla es muy atractivo, con un set de colores muy llamativo, y un entramado en la capellada muy similar a la energy web que recubre la media suela, lo que le da continuidad y consistencia al diseño. Desde la primera postura se robó todas las miradas. Al tomarlas, se sienten ligeramente más pesadas que las Sonic (305 gramos en número US 9), peso adecuado para la amortiguación y soporte que entregan.
Como ya es tradicional en los modelos de entrenamiento de Under Armour, destaca la comodidad y adaptación al pie. Desde el primer paso, sin necesidad de correr, se siente una zapatilla muy amortiguada, sensación que se amplifica al correr y que dura a lo largo de todo el kilometraje que queramos hacerle, lo que es una muy buena noticia para corredores de peso medio-alto, que buscan hacer “tiradas” largas sobre una zapatilla amortiguada y cómoda.
La estabilidad de la zapatilla es sobresaliente, lo que me llamó la atención ya que la capellada no tiene piezas rígidas o exoesqueletos, y por lo tanto todo el protagonismo en este apartado se logra con el diseño de la mediasuela.
Sensor conectado a MapMyRun:
Definitivamente la gran innovación que tiene este modelo, y por lo tanto merece un capítulo aparte. La verdad, al enterarme de la existencia del sensor, cuestioné su utilidad, pero luego de usarlo pienso que puede ser un aporte para muchos corredores que por alguna razón no tengan un GPS disponible en algún momento (o simplemente, no lo usan), o para quienes quieran tener métricas de carrera avanzadas como la cadencia y longitud de zancada. Partamos del principio:
La zapatilla derecha de este modelo tiene incorporado un sensor de unos 2,5 cm de tamaño y un grosor de 6 mm, con un peso cercano a 30 gramos. Se comunica con el celular mediante bluetooth de baja energía, y posee un sensor de aceleración. Si bien es un sensor de tamaño considerable, éste ni siquiera se nota al correr con la zapatilla. No es necesario recargar el sensor y, de acuerdo al fabricante, la vida útil de la batería de éste supera a la duración de la zapatilla, por lo tanto no es un tema del cual preocuparse.
El proceso para emparejar en sensor con el celular fue muy simple, así que hasta el más tecnófobo podrá hacerlo. Se debe descargar la aplicación MapMyRun desde Google Play o la App Store, y luego, en el menú “Apps y dispositivos” se empareja fácilmente con la zapatilla, y ya estás listo para correr conectado.
Luego vino la prueba de fuego: dejé el celular en un lugar fijo, corrí un par de vueltas a la pista, registrando la distancia con un GPS (no conectado a la zapatilla). Regresé y sincronicé la App, y el resultado fue una diferencia de apenas un 1%, por lo que pude comprobar en terreno que los datos de distancia que arroja el chip son bastante consistentes.
Ahora sincronizo el sensor con el celular después de cada entrenamiento para, complementario a los datos que me entrega mi reloj GPS, tener los datos de cadencia y longitud de zancada.
Para dar aún más funcionalidad al sensor, este se puede conectar directamente a la aplicación Zwift, por lo tanto desde hoy tus entrenamientos en trotadora podrán ser entretenidos, participando en trotes o trabajos de intervalos grupales en este mundo virtual. Antes, ello se podía realizar sólo con trotadoras Bluetooth tope de línea muy específicas, mientras que desde hoy podrás tener la misma experiencia con cualquier trotadora y tus zapatillas UA, con acceso a las mismas métricas de carrera mencionadas anteriormente.
En conclusión, una muy buena alternativa para personas que no usan GPS ni les gusta correr con el celular, pero también puede ser muy útil si la batería del GPS se agota durante un entrenamiento o un viaje (a quién no le ha pasado). Nunca más dejarás de registrar un entrenamiento.
Evaluación técnica:
Suela: La suela repite la fórmula utilizada en otros modelos: Un caucho más resistente y durable en el talón, la “High Abrasion Rubber”, mientras que la parte delantera se conforma de varios segmentos de la “Blown Rubber”, material un poco más blando y que, por lo tanto, presenta más agarre. Estos segmentos están divididos por surcos que dan flexibilidad a la zapatilla, lo cual es una buena solución, ya que el “Charged Carrier”, compuesto que rodea a la espuma HOVR en la mediasuela, es un material estable pero no particularmente flexible, por lo que estos surcos permiten ganar flexibilidad sin sacrificar la estabilidad.
Mediasuela: La mediasuela es similar al de las HOVR Sonic, ya que se compone principalmente de “HOVR Foam”, rodeada por la “Energy Web”, combinación que aporta una muy buena amortiguación y a la vez un buen retorno de energía, ya que la malla canaliza la energía hacia el único lugar de la mediasuela que no está cubierto por malla: La parte superior. Como ya dije, la mediasuela tiene un material portante exterior, el “Charged Carrier”. La gran diferencia de este modelo con las Sonic, es que en estas últimas la espuma HOVR estaba sólo en el centro de la zapatilla, mientras que ahora recorre toda la mediasuela, dejando el Charged sólo como estructura exterior, lo que explica por qué este modelo de zapatillas son más blandas y amortiguadas. El “drop” es de 8mm.
Capellada: La capellada es bastante estándar si la comparamos con otros modelos más transgresores de la marca. Está compuesta de una malla de doble capa, la interna más tupida que utiliza un gradiente de colores flúor, y la externa, que como ya adelanté, imita la Energy Web, dándole continuidad al diseño. La capa externa está reforzada en las zonas que soportan más esfuerzo, como la que rodea los cordones.
El resultado es una capellada muy cómoda y con buena ventilación. Under Armour ha puesto elementos reflectantes en distintos puntos de la zapatilla, lo que aporta también a la seguridad al correr de noche.
Un punto a mejorar: La lengüeta, que tanto alabé en modelos anteriores, donde se unían al resto de la capellada, haciéndolas muy cómodas. Este modelo vuelve a lo tradicional, separándola de la capellada y haciéndola más gruesa, lo cual me desilusionó un poco.
En números: (de 1 a 7)
- Agarre: 6,6
- Capellada:6,5
- Estabilidad:6,7
- Amortiguación: 7
- Peso:6
- PROMEDIO:6,6
Conclusión: Luego de probar estas zapatillas con sensor incorporado, estoy convencido de que esta tecnología debe seguir desarrollándose y así lo hará. No como una alternativa al GPS, sino como un complemento que nos podría entregar a futuro métricas aún más avanzadas, como la potencia. Una verdadera revolución.
Respecto al modelo propiamente tal, es una zapatilla netamente de entrenamiento de alta amortiguación, y que por lo tanto son el modelo ideal para hacer muchos kilómetros, pero que no tienen problemas al exigir ritmos más rápidos gracias a la respuesta ágil que entrega su mediasuela.
Estas zapatillas las puedes conseguir en la web de Under Armour a un precio de $89.990.
por Cristian Aspillaga
Lunes 15 de abril de 2019