Nunca Entregarse!!!

Seguro Ud. está pensando que esta es la final de la copa del mundo y que estos atletas se están jugando la gloria y una bolsa de US$100.000. La verdad es que no. Están luchando por el 5º lugar en el entretenido Triatlón Sprint de Papudo. Ocurrió el 11 de febrero de 2007. Los protagonistas son Vicente Bobadilla en primer plano y David Medina más atrás. Para Vicente, gran figura del triatlón chileno en la década de los ’90, esta era su temporada de retorno a las pistas después de nueve años ausente.

La carrera fue muy intensa. Felipe Van de Wyngard y Benjamín Munizaga salen en punta del agua. Más atrás, un Pack formado por Christian Möller, Michel Uteau, Mauricio Olivares, Gabriel Iriondo y nuestros 2 protagonistas intentan dar caza a los punteros. Felipe se escapa y con un sólido ciclismo y trote gana de punta a punta con 3 minutos de ventaja. Benjamín hace un buen ciclismo pedaleando solo y se baja a correr con un minuto de ventaja sobre el pack. Mauricio tiene un sólido trote, alcanza a Benjamín y se queda con el 2º lugar. Benjamín es tercero. Gabriel también corre fuerte pero no le alcanza y se queda 4º. Michel abandona y Christian se queda mucho. La lucha es entonces por el 5º puesto.

David mantiene una ventaja en todo el trote. Vicente nunca abandona la lucha y se mantiene a la expectativa. En el último retorno hay una bajada muy fuerte y Vicente se la juega con todo y alcanza a David. En palabras de Vicente “en esta oportunidad aplique mi doble remate: uno para pillar, descansar 5 segundos y el otro para la llegada”. Y así fue. Vicente aplica el doble remate pero las piernas no responden del todo. David se da cuenta de esto y nos cuenta “yo de puro "caliente" lo seguí manteniendo la distancia….al ver que Vicente aflojo los últimos metros, me salió la garra y orgullo para hacer el último esfuerzo..” Efectivamente, ambos están haciendo su último esfuerzo. Parece que Vicente gana, pero comete un error. La meta no está donde el cree. Confunde la línea de meta y se queda desorientado y sin bencina en el estanque. Lo dio todo. David lo pasa en los últimos 3 metros y se queda con el ansiado y luchado 5º puesto.

Estos dos grandes valores de nuestro deporte nos brindaron una lección de espíritu deportivo y combatividad. Nos enseñaron a nunca entregarse aunque sea por lugares secundarios. Y lo más importante, los abrazos después de la llegada demuestran que la lucha, la amistad y el respeto, al menos en el deporte, son perfectamente compatibles.

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