Trombosis venosa profunda

Los triatletas somos personas saludables que no pasamos de un ocasional resfrío o una lesión derivada de nuestro deporte; otitis por la natación, fractura por la bici o desgarros en el trote.

Sin embargo, nuestra actividad sí nos expone a algunos riesgos que la mayoría desconoce.

Las trombosis venosas profundas (TVP) son más comunes en los adultos de más de 60 años; sin embargo, pueden ocurrir a cualquier edad. Cuando un coágulo se desprende y se desplaza a través del torrente sanguíneo, se denomina émbolo, el cual se puede atascar en el cerebro, los pulmones, el corazón o en otra área, lo que lleva a daño grave o muerte.

Los coágulos de sangre se pueden formar cuando algo disminuye o cambia el flujo de sangre en las venas. Los factores de riesgo abarcan: reposo en cama, antecedentes familiares de coágulos sanguíneos, fracturas en la pelvis o las piernas, haber dado a luz en los últimos 6 meses, obesidad, cirugía reciente, cáncer y tomar pastillas anticonceptivas. Otros factores comunes son cuando se utilizan moldes ortopédicos (yeso), o durante los viajes de largo recorrido, conocido como el síndrome de clase económica. Si el viaje es en avión el riesgo es mayor por las condiciones de presión de la cabina.

Este último punto es el que quiero recalcar, ya que se ha visto que el 85% de las personas que manifiestan TVP por viajes largos son atletas y que en su mayoría son fondistas. Nuestra baja frecuencia cardiaca basal es la responsable, ya que al circular la sangre en forma más lenta se favorece la formación de los coágulos. Para llegar a muchas de nuestras triatlones nacionales e internacionales debemos hacer viajes que superan las 3 horas y que son los que se consideran de riesgo.

Los síntomas que deben producir alerta son: dolor de piernas habitualmente unilateral, hinchazón de piernas y en casos más graves complicaciones respiratorias.

El diagnóstico se realiza a través de ecografía y un examen de sangre de Dímero-D.

Lo bueno es que la prevención es simple. En cualquier viaje de más de 3 horas:

• Levantarse del asiento al menos 1 ó 2 veces por hora (no duerman todo el viaje).
• Mover regularmente las piernas.
• Mantener una muy buena hidratación (nada de alcohol ni café).
• Usar medias de compresión (completas de pie a rodilla).
• No usar ropa ajustada, un buzo es ideal.

Hay bastante información en la web si quieren profundizar.

Mi motivación para escribir este artículo fue que gran parte de la población no está informada del tema y que voy a estar varias semanas sin entrenar producto de que estoy con una TVP. Esto, luego de un viaje de 14 horas en avión donde dormí gran parte, me moví poco y no me hidraté lo suficiente. Me pilló en mi mejor momento deportivo, habiendo batido mi record personal en los 42K de Santiago hace un mes.

Álvaro Montenegro
Triatleta y Químico Farmacéutico

_{Martes 25 de junio de 2013}

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