Tomás Olavarría: Mundial IM 70.3 Las Vegas 2012

Desde que llegué a Las Vegas el 3 de septiembre sabía que esta iba a ser una de las carreras que más iba a sufrir. Todo partió mal. Llegué al hotel y tuve que estar esperando ahí unas 6 ó 7 horas porque no me querían dar la habitación, ya que era menor de edad y cuando ya era de noche me pasaron la habitación por compasión y después de mil llamadas de mis papás al gerente… Jajaja

Bueno, … al otro día llegó Marcos con todo el grupo y mi compañero de cuarto Camilo Nesbet. Debo agradecerles la verdad por haberme acogido tan bien con su grupo y todo y por los trabajos específicos que nos hizo antes de la carrera.

El día de la carrera me desperté, desayuné algo normal ni muy grande ni muy chico y nos fuimos a la carrera, teníamos casi 2 horas de espera hasta nuestra largada que se me hicieron 10 minutos.

Nos metimos al agua a calentar. Yo ya tenía identificado a un mexicano, que en los entrenamientos de natación en altura que hice en Guadalajara antes del mundial, me tiraba a un ritmo bien fuerte y salía en el primer grupo de agua.

La partida fue flotando. La verdad todos se adelantaron un poco y yo también, estábamos al menos unos 10 metros adelante de la cuerda donde largábamos. Sabía que la partida iba a ser repentina, ya me había fijado en las otras largadas y de repente escucho “in your marcs… piii!!!!”

Partí bien, me sentía con energía y rápido, pero aun así veía unas 8 gorras amarillas adelante mío, me pegué a las patas de un competidor para recuperarme un poco de la partida, luego pegaba un acelerón y le quitaba las patas al que el iba pegado y así fui retomando posiciones, hasta que alcancé el grupo de punta en el agua de unos 4 ó 5 competidores. Les pegó otro acelerón para salir segundo pues iba tercero en ese grupo… Luego otro más, pues quería salir primero del agua y tener una T1 limpia, pero el mexicano me siguió. Éramos sólo él y yo, los otros se habían quedado. Ya estábamos pasando por debajo del puente en el agua y después de recuperarme en las burbujas del mexicano le pegué un cambio de ritmo para salir adelante. Pero él se dio cuenta y no me lo permitió. Salí a sus pies del agua, pero hice una mejor transición y me subí primero a pedalear. Hasta ahí... La carrera perfecta…

El día anterior había escuchado el consejo de un amigo que ya había corrido 3 veces esta carrera y me decía que no me vaya fuerte en la bici… Que me guarde para el trote, pues es una carrera muy dura. Hice caso a su consejo y me fui tranquilo... Pero unos 5 minutos... La adrenalina que me dio la carrera fue más fuerte. Cerca del kilometro 15 de la bici me pasaron unos tipos que iban a muy buen ritmo y me fui a 7 metros de ellos. El calor era muy fuerte, creo que si tome 3 litros de agua sólo en la bici sería poco decir.

Era sólo un giro Y se me hizo muy largo, pero a muy buen ritmo ya van quedando solo 20 km. El vapor sale por todo el pavimento, me quedan 20 km para terminar la etapa, pero esos últimos kilómetros eran los más duros, todo en falso plano y con mis piernas ya bien adoloridas. Sólo pensaba… Vamos Tomás es el mundial!!! Tu mejor esfuerzo… Ese fue el trato…. Tu mejor esfuerzo. Agarré un poco más de fuerza para continuar en ese último tramo... Al terminar la bici se me comenzaron a acalambrar las manos y pensé: “Esto no se ve bien”… Acomodé las manos en el profile, para evitar esos calambres que la verdad me dolían bastante… Llegando vi a la gente trotar y eso me alivió bastante ya había llegado…!!!! Ufff me alcanzó Tomás Rivera!!! Y trota como máquina… Mejor no lo suelto, pensé…

Juntos, entregamos nuestras bicicletas, y recogimos nuestras bolsas de trote Cuando entramos a la carpa para cambiarse me sorprendí ver que habían al menos unas 60 sillas y casi todas ocupadas con gente que parecían estar inmóvil . Me siento al lado de Tomás para ponernos las zapatillas y él me dice: ¡¡¡Estoy raja!!!!.... Me dio gusto saber que no era el único que se había bajado cansado a correr. Acompañado de cierto modo.

Partí el trote al lado de Tomás y en una bajada perfecta para partir rápido. Es difícil saber cómo vas con tanta partida diferida. Los elite parten una hora y media antes. Y largan una y otra vez. Me perdí en eso…

Me escapé un poco de Tomás, me pilla en una subida y nos fuimos juntos un rato a un buen ritmo. Sentía unos tirones en los cuádriceps con cada pisada, pero pensaba: “No importa, es el mundial, haz tu mejor esfuerzo… Tu mejor esfuerzo!”.

A los 3 km, en una curva me dio un calambre cerca de la rodilla por el soas interno de la pierna derecha, tan intenso que me bota al piso. Me agarré de un poste que había justo en esa curva y me mantuve agarrado un rato, intentando pararme. Me senté, los músculos se me movían de un lado para otro y yo intentaba mantener la pierna lo más relajada posible. Se me mueven las fibras de la pierna como si me estuvieran haciendo un programa de tens. Mucho dolor. Una chica de la organización me vio y me dice: “Voy a traer a los médicos, quédate tranquilo, no te preocupes…” Buen esfuerzo, pensé unos segundos... Se acababa todo, no puedo mover la pierna. Es el mundial pero no puedo!

A lo lejos veo venir al médico. Y yo abrazado a un poste que a esa altura ya parecía mi novia... jajaja. Al verlo más cerca, saco fuerza y pienso: “Yo no vine para esto… yo no vine para esto”. Con la ayuda del poste me pongo de pie, camino un poco… El dolor baja... Me pongo a trotar... Había vuelto a la carrera!!!!

Los kilómetros pasaban y conforme a eso iba agarrando mejor ritmo. La temperatura era cerca de 40ºC y empecé a sentir frío… Aún no se porque, pero sabía que estaba llevando al cuerpo a sus límites, ya no tenía nada en el cuerpo la verdad. A esas alturas mi meta era terminar más que nada... Dejé de pensar que estaba perdiendo posiciones, y que aún me faltaban 12 km y estaba haciendo un mal parcial en el trote. Volví a tratar de buscar paz y comencé a disfrutar la carrera. Todo se me hizo mas fácil .Ya no sentía tanto frío y llevaba un ritmo más decente, la verdad es impresionante pero cuando uno deja de lado la rabia porque estas haciendo un mal parcial a pie o que perdiste mucho tiempo con los calambres (cerca de 7 minutos parado), la verdad no significa que vas a pasar a correr 30 segundos más fuerte el kilómetro, pero si que vas a ir a un mejor ritmo y no vas a sufrir sino a disfrutar y ahí fue donde todo se me hizo más rápido y pude finalizar la carrera… Y sin tal vez merecerlo, y sin esperarlo, llego a meta como el chileno más rápido... En mi primer mundial y segundo Half de mi carrera deportiva… Orgulloso, sólo de haber terminado… por esta vez.

Luego de la carrera fuimos el grupo de chilenos a un buffet, nos contamos nuestras anécdotas. Todos nos reímos de la carrera casi ridículamente difícil y calurosa. Las cosas que nos había pasado, vómitos, calambres, deshidratación, insolación, frío, etc…

Yo seguía incluso después de la carrera con mis calambres en las manos que me daba miedo agarrar el vaso de soda por miedo a un calambre de mano… jajaja… pero todos estábamos igual.

La verdad los chilenos son buenos para criticar y todo, pero los tiempos y el rendimiento en esta carrera es algo que no se puede comparar con otras... Sólo consigo misma... Es una carrera muy especial y el esfuerzo de todos los chilenos fue algo que se debe valorar. Yo personalmente los vi acalambrarse. Vi como su espalda terminó roja por el Sol y la forma en la que llegaron a la meta.

Felicitaciones a todos, la verdad todos me sorprendieron por su capacidad para aguantar el sufrimiento. ¡¡¡Fuerza interior de triatletas!!!

Agradecimientos también a Shimano Pro por darme una bici y unos componentes que funcionaron perfecto, a Oscar Comentz, mi entrenador, a Marco Ottenhsimer, Gabriel Iriondo, Ana Lecumberri, a mi quiropráctico Rodrigo Sánchez y muchos más, la verdad todos fueron y son un gran aporte para mi. Muy en especial a mi familia que siempre esta conmigo en todo.

Creo que aún soy joven y me queda mucho por delante… Espero seguir aprendiendo y mejorando.

Tomás Olavarría
Triatletas.cl

_{Fecha de la carrera: Domingo 09 de septiembre de 2012}

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